Ultima carta dell Titanic «Hemos tenido un maravilloso pasaje hasta ahora»[/caption]
- La carta fue escrita 8 horas antes de que el barco se hundiera.
- Esta escrita por Esther Hart, que viajaba con su hija y su marido.
La única carta escrita la noche de 1912 en la que el Titanic chocó contra un iceberg fue vendida hoy por el precio récord de 119.000 libras (144.000 euros o 200.000 dólares) en una subasta en Wilshire (sureste de Inglaterra).
Superó el último precio pagado por un objeto relacionado con el hundimiento del transatlántico, de 94.000 libras (115.000 euros o 158.000 dólares), según la casa Henry Aldridge & Son, donde se celebró la subasta de hoy.
La misiva fue escrita por Esther Hart, una de las supervivientes de la tragedia, para su madre, residente en la localidad inglesa de Chadwell Heath.
La noche que Hart escribió esa carta que jamás fue enviada, el 14 de abril de 1912, el Titanic colisionó con un iceberg en su viaje inaugural desde el puerto inglés de Southampton hacia Nueva York, lo que provocó su hundimiento el día 15 al sur de Terranova (Canadá).
Esther Hart y su hija Eva, de 7 años, fueron rescatadas tras el hundimiento, y Eva vivió hasta 1996, pero su padre, Benjamin, murió en el naufragio.
La correspondencia con el logotipo de la bandera White Star Line, propietaria del Titanic, fue adquirida hace varios años por la persona que la ha puesto ahora a la venta, de acuerdo con la casa de subastas.
Según Herny Aldridge & Son, Hart escribió en la carta que estaba mareada y no había podido comer ni beber, pero que su hija lo estaba pasando bien e iba a cantar esta noche en un concierto a bordo.
En el hundimiento del Titanic murieron más de 1.500 de las 2.224 personas que iban a bordo, mientras los restos del barco, sumergidos a 4.000 metros de profundidad, fueron encontrados en 1985.
En la misma subasta se vendió hoy un menú de desayuno de segunda clase del único viaje del transatlántico por 87.000 libras (105.000 euros o 146.000 dólares), también por encima de lo estimado.
El contenido de la carta
«Queridos míos, es domingo por la tarde y nos hemos reunido en la biblioteca después del almuerzo. Todo el día de ayer me encontré muy mal, no pude comer o beber, estuve enferma todo el tiempo, pero hoy ya me encuentro mejor. Esta mañana Eva y yo fuimos a la iglesia y se puso muy contenta cuando cantaron ‘Oh Lord, help in ages past’, que es un himno que ella canta muy bien, por eso cantó muy alto. Está preciosa.
Le he comprado una pelota, una caja de caramelos de toffe y una foto del barco, a todo el mundo le llama la atención…es un peluche. Mañana habrá un concierto en el barco para ayudar a volver a casa a los marineros y ella y yo vamos a cantar. Los marineros han dicho que estamos teniendo un viaje maravilloso, no ha habido ninguna tempestad, pero solo Dios sabe que puede pasar. Cuando hay una, estando rodeados de mar sin poder ver tierra, el barco se mueve de lado a lado, pero han dicho que este barco no se mueve debido a su tamaño, eso es maravilloso.
De cualquier manera, ya se mueve suficiente para mi. Seguro que no lo voy a olvidar. El tiempo es agradable pero hay un viento terrible y frío. Dicen que quizá lleguemos a Nueva York el martes por la noche, pero es probable que lleguemos la mañana del miércoles. Espero poder escribir en cuanto lleguemos, esta carta no abandonará el barco pero permanecerá y podréis ver mi mala letra ya que se mueve el barco y me tiembla el brazo. Os mando un menú para que veáis como vivimos. Estoy buscando unas líneas de alguien que anime esta carta un poco. Siempre que cierro los ojos veo todo lo que he dejado, espero que todos estéis bien. Dejad que esto sea una carta sonora ya que no podré escribir correctamente hasta que apoye los pies en tierra de nuevo. Hemos conocido a gente muy agradable en el barco y eso ha sido maravilloso. Pero los largos, largos días y noches están haciendo que sea la semana mas larga de mi vida.
Debo terminar ya con todo mi amor para todos vosotros. De vuestra querida Est.
Montañas de amor y besos para todos de Eva».
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